NOTICIA Programa de Videoarte y Creación Digital

El Museo de Bellas Artes de Bilbao y la Fundación BBVA presentan “Piedra y cielo”, una videoinstalación de Víctor Erice

Piedra y cielo es una instalación audiovisual de Víctor Erice realizada gracias al Programa de Videoarte y Creación Digital, desarrollado conjuntamente entre el Museo de Bellas Artes de Bilbao y la Fundación BBVA. Con ocasión de su estreno este miércoles, 13 de noviembre, el museo ha organizado para ese mismo día, a las 19 horas, una conferencia en la que el propio Erice explicará su proceso de realización. Además, entre el 22 noviembre y el 9 de febrero de 2020, se proyectará un ciclo de cine titulado “Arte y naturaleza”, con filmes que reflejan intervenciones artísticas en la naturaleza junto a otros que ofrecen la visión de diversos cineastas sobre el medio natural.

12 noviembre, 2019

Exposición

Piedra y cielo

Perfil

Víctor Erice

Video

Tráiler

Piedra y cielo toma como motivo el monumento Memorial Aita Donostia dedicado al compositor y musicólogo Aita Donostia (José Gonzalo Zulaika; San Sebastián, 1886–Lekaroz, Navarra, 1956). Situado en la cima del monte Agiña (Lesaka, Navarra), es obra del escultor Jorge Oteiza (1908-2003) y del arquitecto Luis Vallet de Montano (1894-1982). Fue llevado a cabo a instancias de la Sociedad de Ciencias Aranzadi e inaugurado el 20 de junio de 1959, y consta de dos elementos: una estela funeraria creada por Oteiza y una capilla levantada por Vallet.

El propio Erice describe así su trabajo: “Situadas ambas frente a la cámara, han sido sometidas a un proceso de cinematización donde la luz, el sonido y el tiempo desempeñan un papel esencial. La visión diurna establece un contraste con la nocturna. La primera ofrece unas imágenes donde la naturaleza convive con la historia; la segunda intenta captar la dimensión metafísica del escenario, iluminado por la luna, presidido por el fulgor de las estrellas. Es decir, los elementos propios de lo que Jorge Oteiza identificó como la ‘Cultura del Cielo’. El cielo fue para él su propósito esencial. Lo evocó en Agiña, con toda su inmensidad, en la piedra. De ahí el título de esta instalación”.

La instalación consta de dos proyecciones de grandes dimensiones, –Espacio Día y Espacio Noche– de unos nueve minutos de duración cada una, que podrán verse dentro del Programa de videoarte y creación digital, desarrollado conjuntamente con la Fundación BBVA. El sonido incluye una pieza emblemática en la producción de Aita Donostia –Andante doloroso, su última composición para piano, fechada en 1954– interpretada por uno de los mejores conocedores de su obra, el pianista Josu Okiñena (San Sebastián, 1971).

“El escultor”, explica Erice sobre Oteiza, “se reconoció a sí mismo como un artista del cielo en contraposición a los artistas de la tierra. A través de una experiencia de la infancia, contó de qué manera el cielo le proporcionó su primera comprensión estética del mundo. La gran bóveda celeste fue desde entonces para él su lugar de reposo y protección ante los miedos de la existencia”.

“En cuanto a la capilla”, señala el cineasta, “la obra quizá más representativa de Luis Vallet, fue concebida formalmente como un sencillo parabo­loide inclinado, que representa una embarcación varada en la montaña. Una estructura capaz -según declaró su autor- ‘de dar la sensación de condensar y reunir todos los sonidos y músicas de la naturaleza vasca, como lo hiciera el gran musicólogo que recordamos, que ha sido proyectada para ser realizada en hormigón armado, material de nuestra época tan imperecedero como el material neolítico’”.

Erice también destaca que “la instalación ha querido integrar en sus imágenes un pequeño testimonio de la escritura más íntima de Jorge Oteiza, su condición -menos conocida- de poeta. No en vano manifestó: ‘La poesía es lo que me cura, lo que me quita la angustia y me devuelve el equilibrio. La poesía es mi marcapasos'”.